Asistentes digitales artificialmente inteligentes como Siri de Apple, Alexa de Amazon y el Asistente de Google se están apoderando del mundo de forma lenta pero segura, apareciendo en una miríada de dispositivos que van desde teléfonos a altavoces, pasando por televisores y coches y, a partir de la semana pasada, incluso aparatos de cocina como microondas.
Sin embargo, si usted es un usuario frecuente de cualquiera de los asistentes mencionados, es probable que haya una característica que haya deseado en varias ocasiones y en ciertas situaciones: la capacidad de que sean un poco más discretos.
Ahora Amazon ha proporcionado más detalles sobre sus planes para abordar esa necesidad al mejorar la capacidad de Alexa para entender el habla susurrada. La próxima función, que se anunció por primera vez la semana pasada junto con la gama de nuevos dispositivos Echo de la compañía, significa que cuando Alexa detecte que un usuario está susurrando, el asistente responderá automáticamente en un volumen más bajo y en un tono silencioso.
La función llegará primero al mercado estadounidense y estará disponible a partir de octubre.
Aprender a escuchar
Según Zeynab Raeesy, un científico del habla que trabaja en el equipo Alexa Speech de Amazon, «El habla susurrada es predominantemente sin voz, lo que significa que no implica la vibración de las cuerdas vocales, y tiene menos energía en las bandas de frecuencias más bajas que el habla ordinaria».
Esto significó que para habilitar las nuevas capacidades, el equipo tuvo que hacer ajustes en la forma en que se procesaba el sonido después de ser capturado, y están planeando presentar un documento sobre sus hallazgos en el Taller de IEEE sobre Tecnología del Lenguaje Hablado en diciembre.
Con Google, Amazon y Apple esperando que los asistentes de voz sean un gran mercado para el crecimiento, añadir un soporte susurrante a las tecnologías de reconocimiento de voz tiene mucho sentido.
Ofrece a los usuarios la posibilidad de utilizar los asistentes de forma más discreta y, en teoría, debería ayudar a las personas a sentirse más cómodas a la hora de utilizar el control por voz en una gama mucho más amplia de entornos, como cuando se está en público, en la oficina o en la escuela, o simplemente tratando de evitar despertar a ese gatito que duerme en su regazo.
Cosas dulces
Por supuesto, una mejor conciencia contextual también tiene el potencial de hacer que los asistentes de IA parezcan un poco más humanos, también – aunque si lo ves como un pro o un contra, probablemente dependerá de tus sentimientos generales hacia esta época de florecimiento de la inteligencia artificial.
Por un lado, damos la bienvenida a nuestros nuevos señores de la digitalización, y esperamos el día en que podamos salir de la cama para tomar un tentempié a medianoche y susurrar en voz baja «Alexa, calienta este trozo de pastel de chocolate» en el microondas sin molestar al resto de la casa.
